Carlomagno Magnus; 2 abril 742, 747 o 748-Aquisgrán, 28 enero 814), de nombre personal Carlos, como Carlos I el Grande, rey de los francos desde 768, rey nominal de los lombardos desde 774 e Imperator Romanum guber-nans Imperium desde 800 hasta su muerte. Carlomagno consiguió unir la mayor parte de Europa Occidental y Central y fue el primer emperador reconocido en gobernar Europa Occidental tras la caída del Imperio romano de Occidente, aproximadamente tres siglos antes. El Estado franco expandido que fundó Carlomagno fue el Imperio carolingio, considerado la primera fase de la historia del Sacro Imperio Romano Germánico. Fue canonizado por el antipapa Pascual III -acto que posteriormente se consideró inválido- y algunos lo consideran beatificado (que es un paso en el camino hacia la santidad) en la Iglesia católica. Tradicionalmente, la Iglesia católica lo venera como beato el 28 de enero. La Iglesia ortodoxa no veía con tan buenos ojos a Carlomagno, debido a su apoyo a la clásula filioque y a la preferencia que mostró el Papa hacia él como empera-dor frente a la primera mujer monarca del Imperio bizantino, Irene de Atenas. Estas y otras disputas condujeron a la ruptura de Roma y Constantinopla en el Gran Cisma de 1054.
Hijo del rey Pipino el Breve y de Bertrada de Laon, sucedió a su padre y virreinó con su hermano, Carlomán I. Aunque las relaciones entre ambos se tornaron tensas, la repentina muerte de Carlomán evitó que estallara la guerra. Reforzó las amistosas relaciones que su padre había mantenido con el papado y se convirtió en su protector tras derrotar a los lombardos en Italia. Combatió a los musulmanes que amenazaban sus posesiones en la península ibérica y trató de apoderarse del territorio, aunque tuvo que batirse en retirada y a causa de un ataque de los vascones, perdió a toda su retaguardia, así como a Roldán, en el desfiladero de Roncesvalles. Luchó contra los pueblos eslavos. Tras una larga campaña logró someter a los sajones, obligándolos a convertirse al cristianismo e integrándolos en su reino; de este modo allanó el camino para el establecimiento del Sacro Imperio Romano Germánico bajo la dinastía sajona. Expandió los distintos reinos francos hasta transformarlos en un imperio, al que incorporó gran parte de Europa Occidental y Central. Conquistó Italia y fue coronado Imperator Augustus por el papa León III el 25 de diciembre de 800 en Roma, gracias a la oportunidad ofrecida por la deposición de Constantino VI y lo que se consideraba la vacancia del trono imperial, ocupado por una mujer, Irene. Estos hechos provocaron la indignación de la corte imperial, que se negó a reconocer su pretendido título. Tras unos frustrados planes de boda entre Carlomagno e Irene, estalló la guerra. Finalmente, en 812 Miguel I Rangabé reconoció a Carlomagno como emperador (aunque no «emperador de los romanos»). (Sigue leyendo...)
No hay comentarios:
Publicar un comentario